He regresado a casa, después de un viaje un poco raro...
(a por cierto casi vuelvo a perder el tren, pero esta vez por culpa de mi hermano).
Ha estado lloviendo desde que salí y temía que las vías del tren estuvieran malas, menos mal que no fue así y llegué a casa, sana y salva, con el estómago a reventar de tanta comida que me dieron y con ganas de volver después de la atenciones tan espectaculares que me hicieron, de verdad que bonito es sentirse apreciado por lo demás.
Pondré las fotos que tomé, pero no de la ciudad, es que no me dió tiempo... lo siento
